Ossip Maldelshtam
ME HA SIDO DADO UN CUERPO TAN ÚNICO Y MÍO
pero ¿qué hacer con él?
Díganme ¿a quién debo agradecer
la silenciosa alegría de respirar y vivir?
Soy el jardinero y la flor,
no estoy solo en la celda del mundo.
En los cristales de la eternidad
ya descansa mi aliento, mi calor,
y en él se imprime un dibujo
irreconocible en los últimos tiempos.
Que descienda el sedimento de un instante
y que el dibujo amado no sea borrado.
1909/
LLUVIA MOSCOVITA
¿Hacia dónde cae tan avaramente
su frío de gorrión
un poco para nosotros, un poco para los bosques
y para el canasto de cerezas?
En la oscuridad crece la ebullición,
como el alboroto ligero de las hojas de té,
como un hormiguero aéreo
que hace su festín en el verdor oscuro.
La viña de gotas frescas
tiembla en la hierba
como si un semillero de frío
se abriera en la Moscú campesina.
Verano de 1922
Ossip Maldelshtam
(traducción de Belén Ojeda)