martes, 17 de abril de 2007

Second Life, escoge tu evasión





Second Life es un portal en internet que está configurado como una ciudad virtual donde puedes vivir pagando una cierta cantidad. Creas un personaje, con determinadas características, que se amolden al lugar y vas viviendo una vida paralela con sus avatares. Nada mejor que este portal para darnos cuenta el modo en que la evasión ha ido cobrando terreno entre los seres tecnologizados de este planeta, quizá como la única salida frente a un mundo en el que las diferencias parecen irse ahondando cada vez más. Las diferencias culturales, sociales, ideológicas, etc. ¡Paren el mundo que me quiero bajar! No estoy en contra del mundo virtual, la informatización del mundo civilizado es irreversible, y cada quien es dueño de compensar como mejor le parezca los lados non gratos de su vida cotidiana. Crear una ciudad virtual es un derroche de creatividad, al igual que otras múltiples distracciones que ofrece la web. Si el homo ludens no existiese este sería un planeta verdaderamente horrible. El problema que yo veo tiene que ver con los límites del contacto que cada quien tiene con internet. Hace algunos años vi una película protagonizada por Sandra Bullock que abordaba este problema, se llamaba “La red”. En esa película el personaje protagónico empieza a aislarse de los seres humanos, conectada permanentemente a la computadora, trabajaba en su casa, pedía la comida por internet, todo lo que implicase contacto humano se había desplazado hacia la máquina, el contacto mediado. Ella termina descubriendo algún secreto de Estado, es perseguida, se la borra de todo registro ciudadano. Lamentablemente, hay personas cuya adicción a la red casi cae en esos extremos. Están cada vez más conectadas con sus amigos cibernéticos y te es muy difícil conversar con ellos. Son probablemente las personas que pagan o pagarían por vivir en Second Life. Como no pueden vivir plenamente en su mundo real eligen de manera permanente o casi permanente estar en otra parte, el mundo virtual. Mi hermana Isabel dice que debe crearse urgentemente “Cibernéticos Anónimos”, para albergar a estas personas cuya adicción a la red ha traspasado el límite de lo sano. Probablemente no haya manera de salvar este planeta, y se necesita una enorme dosis de paciencia y resignación para vivir, o mejor dicho sobrevivir, en él, pero sustituir el contacto humano por el maquinal, o sustituirlo en gran medida ¡es patológico!

Caracas, 17 de abril de 2007, entre 8:30 y 9: 10 am.

(En la ilustración de este comentario les dejo una imagen de Mariko Mori, “Birth of Star”. Mori es una artista japonesa cuya obra me ha interesado desde hace varios años, porque ha representado de manera extraordinaria esa necesidad de evasión que todos tenemos. En la obra de Mori se entrelazan su milenaria cultura con los íconos de la cultura pop y la tecnología de punta. Ha trabajado con fotografía, performance e instalaciones. En la web pueden conseguirse páginas sobre su obra. En la revista web venezolana Kalathos (http://www.kalathos.com/) se publicó hace algún tiempo un artículo mío sobre su obra.)