lunes, 19 de diciembre de 2011

Taller de Poesía

A partir del miércoles 18 de enero iniciaré en la Casa Uslar Pietri en La Alta Florida, de 3 a 5 pm, Taller de Poesía, y el sábado 21 de enero el Taller de Cuento (Subgéneros Narrativos: Literatura Fantástica, Ciencia Ficción, Historias basados en personajes reales y Literatura Infantil)los interesados en participar pueden llamar al Teléfono 7302571 o escribir a casauslarpietri@gmail.com. El 19 de enero comenzaré en la Biblioteca de Los Palos Grandes el Taller de Crónica.
:-D Mis mejores deseos para estas navidades y para el 2012.

Beatriz Alicia García

ROBERTO JUARROZ (Argentina, 1926)

Roberto Juarroz "Séptima Poesía Vertical"

2

Un misterio
cuyo mayor misterio sea su claridad.
Un misterio que consista en mostrarse.

Un misterio que desnude la palabra del hombre
hasta volverla un perfil de roca en el silencio.
Un misterio al que haya que acostumbrarse
como un ojo a una nueva forma de la luz.

Y entonces,
plantar allí los últimos jirones,
los jirones que engendran su propio viento
para poder flamear donde todo termina,
donde sólo es posible
la suprema claridad del misterio.

4

De una cantera que no existe
he extraído piedras que existen
y he levantado con ellas un pequeño muro
para poner encima nada más que una palabra,
una palabra que conozco
pero no puedo pronunciar.

mi trabajo es ahora
excavar su hueco exacto
en esas piedras extraídas
de una cantera que no existe,
para que pueda pronunciarla
el viento que pasa.

9

Toda palabra llama a otra palabras.
Toda palabra es un imán verbal,
un polo de atracción variable
que inaugura siempre nuevas constelaciones.

Una palabra es todo el lenguaje,
pero es también la fundación
de todas las transgresiones del lenguaje,
la base donde se afirma siempre un antilenguaje.

Una palabra es todavía el hombre.
Dos palabras son ya el abismo.
Una palabra puede abrir una puerta.
Dos palabras la borran.

16

¿Es la poesía un pretexto de la locura?
¿O es la locura un pretexto de la poesía?

¿O las dos son un pretexto de otra cosa,
de otra cosa excesivamente justa
y que no puede hablar?


(A Elkin Restrepo)


42

El hombre es siempre
el constructor de una cárcel.
Y no se conoce a un hombre
hasta saber qué cárcel ha construido.

Algunas veces parece sólo la propia,
pero siempre es también la de otros.
Y no le basta con construir la prisión:
aporta también el carcelero.

Lo único que el hombre no pone
es el material para hacer la prisión,
porque sobra en todas partes.

Pero hay otra cosa
que no sabemos quién la pone:
el combustible para el incendio.


ROBERTO JUARROZ


(Tomado de: "Séptima Poesía Vertical")

lunes, 5 de diciembre de 2011

Carmen Chazzin

Poetas al ruedo. Carmen Chazzin

Ante todo me disculpo por mi largo silencio. Diversas actividades me han mantenido alejada de mi Bitácora para lugares reencontrados, donde voy compartiendo autores que voy leyendo. En esta ocasión deseo compartir el primer libro editado por una joven poeta de Valencia, ciudad que visité, por primera vez, algunas semanas atrás. El título del libro es "Alrededor" Y fue publicado en mayo de 2011 por la editorial gubernamental El Perro y La Rana. Carmen Chazzin (Valencia, 1989) quien acaba de terminar sus estudios en la Facultad de Educación de la Universidad de Carabobo, Mención Castellano y Literatura, siendo su trabajo de tesis sobre la poeta venezolana Hanni Ossott; ha sido una de las organizadoras de las Jornadas de Creación Literaria de la Universidad de Carabobo y ha participado en diversos talleres de creación coordinados por Laura Antillano, María Clara Salas, Luis Alberto Crespo y Rafael Cadenas. Ya en este primer libro encontramos una voz extraordinaria y una honda sensibilidad que auguran una vocación literaria de hondas raíces, que tendrá permanencia en el tiempo. Copio entonces algunos de los textos del libro "Alrededor" publicado este año por Carmen Chazzin:


"Mar, en ti confío para que des a los otros su límite
como a la playa"
HANNI OSSOTT


Se es
náufraga
vigilante taciturna
bajo agua
bajo regadera desbordante
descalza
se es murmullo
preámbulo
rostro
música vieja
domingo bajo la almohada
tristeza en el ascensor
manos cruzadas
contemplación de los árboles
creados para vernos
y sufrirnos
atados


&&&&

Pájaro de limpios ojos
me voy
somos muy amplios

Mañana habrá otra altura
ahora sostente en lo solo
y sé hondo en la puerta
la otra piel
donde se escucha mi canto

&&&&

Habla
mientras te suspendes
en el temblor de la cortina
en las formas que toma lo oculto
y su marcha lenta allá afuera

habla
desde lo seco del tallo de la hoja
desde la desnudez de la piedra al
decantarse

habla sin contornos
bórralos como el polvo
que nunca logramos quitarnos

habla
sé como el espejo de agua
ceñido a tu piel.

&&&&

"De un silencio
vendrá la respuesta
la encendida honestidad"
RAFAEL CADENAS

A ratos me detengo en las líneas
deposito silencios
que caen
en sillas
mesas
como vísceras de un reloj
ahogado

escapar
presentir la pausa del día
saberse miembro de los dolores del mundo
debatir heridas
cobijo viene
al escuchar con ojos del otro


CARMEN CHAZZIN

lunes, 21 de noviembre de 2011

Blanca Andreu

Poema de Blanca Andreu

EN LA INDIA (LOTO)

-¿Quién eres tú,
misteriosa
paloma vegetal de las aguas
perfumada estrella viviente?

-Cuando alza el azafrán como un monarca
su morada corona
y hace brillar su pitilo escarlata
del color de unos labios diciendo: "cosechadme"
y las lentejas de agua y las castañas de agua
abren sus verdes ojos y pasean por el lago
yo lanzo mis raíces
a las profundidades
nevego
por debajo
en un viaje de muerte
como el amor terrible
atravieso el olvido
y llego hasta la tierra sub-acuática
como a un palacio negro
y allí entro
sombrío, soberano
a comenzar mi historia
apareciendo.
Y luego
vivo contra las aguas
desde la tierra al cielo
como el amor real
y majestuoso
subo
de la savia a la flor
y entonces soy
corazón blanco en las manos del río
soy nube anclada de salvajes raíces
soy el suave cordero
de las lagunas:
la rosa de Sidharta.


BLANCA ANDREU

(De "La tierra transparente")

BLANCA ANDREU. (La Coruña, 1959). Pasó su infancia y adolescencia en Orihuela, Alicante y Murcia, posteriormente se trasladó a Madrid, donde contrajo matrimonio con el novelista Juan Benet en 1985. Pertenece a la llamada "Generación Postnovísima" española. En 1980 obtuvo el Premio Adonais con su libro "De una niña de provincias que se vino a vivir en un CHagall" y en 1982 el Premio Mundial de Poesía Mística Fernando Rielo con "Báculo de Babel". Posteriormente publicó "Elphistone" en 1988 y "Sueño oscuro" en 1989. En 2001 le fue otorgado el Premio Laureá Melá de Poesía por el libro "La tierra transparente". A la muerte de su esposo, ocurrida en 1993, se radicó en La Coruña.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Humberto Ak' abal

ORACIÓN

Que se habra la puerta del sol,
que se habra la puerta de la luna.

Que haya claridad en el cielo,
que haya claridad en la tierra,
que haya claridad en el alma;

que la luz no le de paso
a la oscuridad,
para no perder la seña
de nuestro camino.

Humberto Ak' abal

lunes, 12 de septiembre de 2011

Biblioteca Los Palos Grandes

Próximos cursos y talleres

¿Te gusta la ciencia-ficción? El próximo sábado en la Casa Uslar Pietri estaré dictando taller de narrativa en el cual me centraré en la ciencia-ficción, sus personajes, sus vertientes. Para inscribirte escribe a casauslarpietri@gmail.com o asiste directamente de 3 a 5 pm a la Casa Uslar Pietri Av. Los Pinos, Alta Florida.

A partir del miércoles 21 iniciaré en la biblioteca Los Palos Grandes el curso Crónicas escritas por mujeres y el jueves 22 el Curso Poesía venezolana contemporánea. Para inscripciones asiste a la Sala Eugenio Montejo de 9 am a 7:30 pm.

Beatriz Alicia Garcia

viernes, 2 de septiembre de 2011

Rajandaye Ramkissoon-Chen


Poetas del Caribe. Rajandaye Ramkissoon-Chen

STILL MY TEACHER

(Miss S.S.)

I saw the opening flower
Still fastened with dewdrops
And I remember how she said
"In nature there is excellence:
Two reclining clouds
On a bed of sunset sparkle,
A drop of ocean,
Rainlines picking bubbles"
And she became my teacher,
Once more.

She had dusted her books
After the croptime,
When burnt sugarcane drops
Like wisps of feathers
To mark her shelves
With curlicues of ash.
And her heart, like with angina, ached
To make a gift.

"For you" she wrote. The cover jacket
Showed gaps like nibbled-ut knowledge,
Daubs of fingers, tears
That looked like moth-tracks runnig.
The aged pages were the sanctum
The some poet's most inner thoughts.

"Shine! like him! she commanded
"With that heaven-light".
And I saw me
A coiled cotton wick of flame
Again, from her, drawing oil.

Rajanfaye Ramkissoon-CHen
(Trinidad)

(Traducción al español):

AÚN MI MAESTRA

(señorita S.S.)

Vi la flor que se abría
Aún pegada con gotas de rocío
Y recuerdo como dijo
"En la naturaleza hay excelencia:
Dos nubes que descansan
Sobre una cama de ocaso centellean,
una gota de océano,
Chorros de lluvias que remueven burbujas
En el camino".
Y devino mi maestra
Una vez más.

Ella había desempolvado sus libros
Después de la zafra,
Cuando la caña quemada gotea
Como mechones de plumas
Para marcar sus estantes
Con adornos de ceniza.
Y su corazón, como con angina,reventaba
Para hacer un regalo.

"Para ti" escribió. La sobrecubierta
Mostraba vacíos como conocimiento mordisqueado,
Embarros de dedos, lágrimas
Que semejaban pistas de polillas que corrían.
Las vetustas páginas eran el sitio sagrado
Para los pensamientos más íntimos de algún poeta.

"¡Brilla como él!" me ordenó
"Con esa luz celestial"
Y me vi
Una enrollada mecha de lagodón en llamas
Sacando de ella, otra vez, petróleo.


(Trad. Luis Toledo Sande)



Rajandaye Ramkissoon-Chen. (1936-2009). Medico y escritora, nacida en Trinidad, de origen hindú. Escribió narrativa corta y poesía. En 1966 ganó con su relato “Josiah’s Escape” el Longman Trinidad Short Story Contest. Publicó cuatro volúmenes de poesía: Ancestry, Mirror Eye, Many Sides of Red, and Meenachi.

martes, 30 de agosto de 2011

Wislawa Szymborska



POESÍA INÉDITA. GRECHELL SOCORRO

COMO SI NO QUISIERA

¡Qué vergüenza!
Si la lira me viera,
a mí,
que sólo quería ser el gato de Szymborska
durmiendo dentro del piano.

Ella con su lápiz tocando melodías
en un idioma extraño que no entiendo,
que no sé leer,
que no sé escribir,
pero
cuando Szymborska pasa su mano
sobre mi pelaje adusto
frunzo el ceño,
como si no quisiera,
y así soy con mis amigos,
como si no quisiera.

Así comencé mis clases de Braille,
a ver
si al fin nos entendemos
los poetas,
sus ombligos
y yo,
como si no quisiera.


GRECHELL SOCORRO

2011

LAZOS DE FAMILIA EN BLANCO NOCTURNO DE RICARDO PIGLIA (3)

LA BÚSQUEDA DE LA VERDAD

Si algo parece fundamental en Blanco nocturno, y en la obra de Piglia, es la importancia que cobra la búsqueda de la verdad. Esa búsqueda encuentra en el esquema del relato policial su forma ideal, porque per se su estructura gira en torno al esclarecimiento del crimen, sus motivaciones, quién lo lleva a cabo -la búsqueda de la verdad-, pero también le permite mostrar al escritor, según ha expresado Piglia, el modo en que el proceso de escritura narrativa conlleva una búsqueda textual, de composición, que se va desentrañando en la medida que se construye. En este proceso de búsqueda simultáneo, la verdad de la historia relatada, y la forma textual en que debe presentarse ante el lector, se expresa, de una manera oblicua, en lo no dicho, en lo sugerido, verdades que la sociedad no tolera decir claramente. Como expresáramos al inicio de estas líneas, en Blanco nocturno, tras un aparente crimen pasional, sostenido por el fiscal Cueto y otros habitantes del pueblo, el asesinato de Tony Durán encierra una compleja historia familiar en la que se entrelazan la ambición, los celos, el incesto, la traición, el honor y el deshonor. Las gemelas se meten juntas en la cama de Durán, juegan a los novios con los hermanos, hasta que la madre de ellas acaba con el juego, seducen al padre desde niñas, viven escandalizando al pueblo con sus actitudes. Pero finalmente detrás de tanta trasgresión y erotismo hay algo más, hay una compleja trama vinculada al ejercicio del poder.
Expresa Piglia en una entrevista en referencia al género policial y el proceso de escritura:

Es un género que plantea los problemas de la narración, aquellos que enfrenta cualquier narrador, y los propone como tema. El problema central que tiene un narrador –qué es lo que narro, lo que dejo de narrar-, el secreto, el suspenso, el misterio, se convierte en el tema del relato policial [...] los cadáveres están ahí nada más que para plantear estos problemas: cómo avanzo en la narración, cómo introduzco un elemento que hace virar el relato. Todas esas cuestiones tienen que ver con cualquier historia que uno cuente, y eso explica un poco el hecho de que sea un género que tiene un lugar tan importante”. (Fornet 2000, p. 33)

Tanto el comisario Croce como el periodista Emilio Renzi representan en la narración la personificación textual de esa doble búsqueda de la verdad del escritor: la expresión de una verdad, que es el comienzo de la escritura, lo que lo incita a emprenderla y de igual modo la búsqueda formal, cómo construyo un texto que lleve al lector a acompañarme en esa búsqueda de la verdad. La teoría fenomenológica del arte se ha fundamentado en ese vínculo entre texto y lector, el modo en que se reconstruye el sentido en el proceso de lectura (Iser, 1987). Señala Iser: “la parte ‘no escrita’ de un texto estimula la participación creativa del lector” (Iser 1987, p.217). Esto parece particularmente importante en el caso de la obra de Piglia, la cual exige un lector comprometido, dispuesto a atar cabos, leer entrelíneas, poner a la obra “en marcha”.
En Blanco nocturno esa búsqueda de la verdad, que comparten autor y lector, se organiza a través de una narración polífónica. Dicha polifonía es literal, en el sentido de que entramos en la novela con un ritmo trepidante, los últimos días de Tony Durán, y su historia escandalosa con las gemelas Sofía y Ada; pero luego de su asesinato, al iniciarse la narración retrospectiva, tenemos varias narraciones paralelas, cada una con su propio ritmo: la historia de Durán; las diversas historias de la familia Belladona: el abuelo inmigrante, Bruno; el padre, Cayetano, y los hijos varones, Lucio y Luca, abandonados por la primera esposa, Regina O’Connor; las gemelas transgresoras y su madre, aparentemente desquiciada, Matilde, segunda esposa de Cayetano; los hermanos Lucio y Luca y su megaproyecto de fábrica que finalmente quiebra; el fiscal corrupto, Cueto, que seduce a una de las gemelas, Ada; el comisario honesto, Croce, que busca la verdad y termina en un manicomio; y el periodista Emilio Renzi, que llegá para reportar el asesinato de Durán.
La historia de la ciudad está estrechamente unida a la historia de la familia Belladona, en un intenso juego de poder en el que se oponen lo masculino y lo femenino. La seducción y el erotismo juegan un papel relevante en la trama: Las gemelas entrampan a Tony Durán y lo llevan a Adrogué; el conserje japonés, Yoshio Dasai, termina como chivo expiatorio y es culpado de un crimen que no cometió, por haberse enamorado de Durán; el vínculo erótico entre el fiscal Cueto y la gemela Ada ha contribuido al poder de éste; tras la preferencia de Cayetano Belladona por la gemelas hay seducción; el vínculo erótico de Renzi con Sofía le ayuda a acceder a la verdad. La trasgresión, vinculada al erotismo se reitera a lo largo de la trama y es lo que conduce a su trágico final. Por lo menos así lo deja entrever Cayetano Belladona al referirse a Durán: “Me gustaba el modo que tenía de hablar y sé lo que había venido a hacer. Pero iba camino de la perdición –dijo de pronto– sin que nadie pudiera evitarlo, igual que mis hijos, por caminos paralelos y divergentes”. (Piglia 2010, p. 208)
El problema del poder, tanto en el ámbito familiar de los Belladona, como en la ciudad, se plantea en el ámbito de influencia de los personajes, quién puede tomar las decisiones, quién domina a quién, pero también esto involucra un aspecto quizá más voluble, pero determinante, el de los afectos. Una generación tras otra de los Belladona ha defendido su herencia, pero así también su lugar dentro y fuera del ámbito familiar, ese territorio o lugar también se juega a través de lo afectivo. El punto de quiebre de la historia parece iniciarse cuando Cayetano Belladona decide repartir su herencia en vida. Por otra parte, como se señala de manera reiterada el abandono al padre y a los hijos de la primera esposa, Regina, es determinante. La segunda esposa, Matilde sabe cuál es su rol, su lugar, y lo acata. Como en toda tragedia a los personajes de Blanco nocturno les toca aceptar su rol en la trama, en algunos casos, no sin luchar, claro está.
Para reconstruir la historia de la familia Belladona lo callado o sugerido, adquiere un peso igual o mayor a lo dicho, como han señalado algunos estudiosos de la obra de Piglia (Pons, 1998; Fornet 2000), más allá de lo que se expresa efectivamente hay un discurso solapado, que hay que descifrar, el texto ausente. Tanto el narrador como los personajes dejan sin esclarecer completamente algunas afirmaciones, veamos algunas frases:

Parecía venir de otro lado –dijo sosegado Croce–, pero no hay otro lado. (...) No hay otro lado, todos estamos en la misma bolsa. (p. 17)
Nadie estaba seguro de que esas historias fueran verdaderas, pero a nadie le importaba ese detalle. (p. 18)
Pero fueron habladurías, decires provincianos, versiones que sólo lograron hacer crecer su prestigio (y también el de las chicas). (p. 33)
Claro que si Durán hubiera sido un yanqui rubio todo habría sido distinto –dijo Madariaga. (p. 34)
Y no parecía posible estabilizar las versiones porque su posible vida secreta era siempre nueva y sorprendente. Un forastero seductor, extrovertido, que decía todo, y también un hombre misterioso, con su lado oscuro, que había sido capturado por los Belladona y en ese torbellino se había perdido. (p. 53)
Las historias que se habían contado sobre el trío, sobre los juegos que habían hecho o habían imaginado, no tenían nada que ver con el crimen, eran fantasmas, fantasías. (...) p. 72

La reconstrucción de la verdad sobre el asesinato de Durán, en definitiva, es relativa. En Blanco nocturno sobre la verdad, como certeza, prevalece la duda. No sabemos lo que efectivamente pasó. Todos los personajes parecen confabularse para esconder la verdad. Todos parecen decir verdades a medias, todo parece indicar una muerte accidental, sin sentido. “No hacía falta matarlo, pobre Cristo” (Piglia 2010, p. 267) expresa Croce en una conversación con Renzi. Pero lo que hace a Blanco nocturno un texto importante es la fuerza con que se pone en escena las pasiones humanas y esa búsqueda de la verdad, que parece mostrar una sociedad caótica y corrompida, donde nada es lo que parece ser, donde ya no cabe encontrar siquiera en pueblos tranquilos y bucólicos paisajes la arcadia perdida. En la perspectiva de narración de Blanco nocturno se mira la sociedad desde el crimen, desde lo que en ésta hay de oscuro e instintivo, de trasgresor, lo que por supuesto, es siempre fascinante y nunca puede explicarse del todo.

BIBLIOGRAFIA

Bibliografía directa:

Piglia, Ricardo. 1980. Respiración artificial. Cuba: Casa de Las Américas.

Piglia, Ricardo. 2000. Formas breves. Barcelona: Anagrama.

Piglia, Ricardo. 2010. Blanco nocturno. Barcelona: Anagrama.

Otras fuentes bibliográficas:

Bratosevich, Nicolás. 1997. Ricardo Piglia y la cultura de la contravención. Argentina: Teruel.

Cappelletti, Ángel. . Positivismo y evolucionismo en Venezuela. Caracas: Monte Ávila Editores.

Fornet, Jorge. 2000. Valoración múltiple Ricardo Piglia. La Habana/Bogotá: Casa de las Américas/Instituto Caro y Cuervo.

Gallegos, Rómulo. Doña Bárbara. Caracas: Fundación Ayacucho.

González Montes, Soledad y Julia Tuñón (comps.). 1997. Familias y mujeres en México. México: El Colegio de México.

Hurtado de Barrera, Jacqueline. 2003. Aproximación a una tipología de la estructura de las familias caraqueñas de menores recursos. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Ciencias Económicas y Sociales.

Iser, Wolfgang. 1987. “El proceso de lectura: enfoque fenomenológico”. En: Mayoral, José Antonio (comp.). 1987. Estética de la recepción. Madrid: Arco Libros.

Méndez Castellano, Hernán et al. . 1996. Estudio Nacional de Crecimiento y Desarrollo Humano de la República de Venezuela. Caracas: Ministerio de la Secretaría. Fundacredesa.

Pons, María Cristina.1998. Más allá de las fronteras del lenguaje. México: Universidad Nacional Autónoma de México.

Rísquez, Fernando. 2000. “Dinámica familiar”. En: Familia: un arte difícil. Caracas: Fundación Venezuela Positiva.

Saraceni, Gina. 2008. Escribir hacia atrás Herencia, lengua, memoria. Argentina: Beatriz Viterbo Editora.


lunes, 22 de agosto de 2011

LAZOS DE FAMILIA EN BLANCO NOCTURNO DE RICARDO PIGLIA (2)

EL PADRE, LAS MADRES

En la compleja y cambiante sociedad contemporánea no existe un modelo único de estructura familiar predominante. Además de la familia nuclear tradicional, compuesta por el padre, la madre y los hijos, un estudio realizado a comienzos de la década (Hurtado de Barrera 2003) da cuenta por lo menos de nueve tipos distintos de estructura familiar: la familiar nuclear, ya mencionada; la familia protectora, dentro de la cual se integra otra familia nuclear de uno de los hijos, o uno de los hijos que se reintegra al hogar con uno o varios hijos propios, luego de una separación; la monoparentales, siendo la más usual el hogar mantenido y protegido por la madre; o así mismo, las reconstruidas, en las que uno o los dos cónyuges, viene con hijos de matrimonios o uniones anteriores, y tienen luego hijos en común; o las matricentradas, en las que varias mujeres separadas, viven bajo un mismo techo con sus hijos. Esta diversidad de modelos familiares evidencia el resquebrajamiento del concepto de familia, en el sentido tradicional del término, un cambio de dinámica en las interrelaciones familiares; lo que es consecuencia a su vez una profunda crisis en la organización de la sociedad contemporánea, marcada por una sexualidad más libre, que se inició en los sesenta, con la comercialización de la píldora anticonceptiva, el amor libre, y un cambio radical en las relaciones entre padres e hijos, en las que los padres ya no son necesariamente el modelo ideal de los hijos.
Este es el contexto social en que debemos situar a los personajes protagónicos de Blanco nocturno, porque detrás del drama que protagoniza la familia Belladona está precisamente un modelo familiar resquebrajado y reconstruido. Tanto Cayetano Belladona como sus hijos varones, son abandonados por Regina O’Connor, su primera esposa, quien embarazada de su segundo hijo, Luca, se “escapa” del hogar familiar, deja a su hijo mayor Lucio, para vivir una aventura con el director de una troupe teatral, a quien abandonará a su vez, tres años después, para irse a su país natal, Irlanda: “los dos hijos nunca le perdonaron que los hubiera abandonado y eso los unió a los dos hermanos en el mismo dolor. Ningún hijo puede perdonar a su madre que lo abandone” (Piglia 2010, p. 120).
Regina, esta mujer extranjera, inestable, básicamente urbana, no logra adaptarse a la dinámica del ambiente rural, no está en ella ser un ama de casa tradicional y tampoco apoltronarse en la vida tediosa de la pampa. Señala Sofía, una de las mellizas nacidas de un segundo matrimonio de Cayetano Belladona: “La culpa de todo es del campo, del tedio infinito del campo, todos dan vueltas como muertos vivos por las calles vacías. La naturaleza sólo produce destrucción y caos, aísla a la gente, cada gaucho es un Robinson que cabalga por el campo como una sombra” (Piglia 2010, p. 119). En esta descripción de la vida del campo, en la que resalta el gaucho, personaje solitaria por antonomasia de la mítica fundacional argentina, y de su literatura, hay implícito un marcado contraste y contraposición no sólo entre lo urbano, ámbito al que pertenece Regina, y lo rural, sino también entre lo masculino y lo femenino. A ese gaucho solitario que cabalga en la pampa realizando sus labores, ese Martín Fierro, que representaría la figura masculina apegada, a pesar de todo, a la tierra (Cayetano Belladona), se contrapone esta mujer extranjera, sin arraigo, a quien su hijo “todavía”, muchos años después de que se ha ido, “escucha insultar en la noche” (Piglia 2010, p. 120) y conversa con ella y “siempre la está viendo” (Piglia 2010, p. 120). Sin embargo, como también señala Sofía: “No podía seguir en este pueblo esa mujer” (Piglia 2010, p. 120).
Por otra parte, podemos señalar, que esta referencia al gaucho, embrutecido, “por el aburrimiento y el vacío”, víctima del “caos y la destrucción” que produce la naturaleza, según lo expresa Sofía, viene a retomar la perspectiva positivista que alimentó la literatura del criollismo, especialmente la llamada novela de la tierra, para la cual el hombre está determinado por su raza y por el influjo que ejerce sobre él el medio al cual pertenece. El título mismo de una novela como La vorágine ya señala el modo en que la naturaleza se impone al individuo. Al inicio de la novela Doña Bárbara de Gallegos la frase “¿Con quién vamos?” textualiza la perspectiva de narración que va a enfrentar dos fuerzas, ya claramente representadas dentro de ese bongo que navega en el Arauca; por una parte, Santos Luzardo, la fuerza civilizadora y del progreso, y el Brujeador, Melquíades Gamarra, que representa el lado oscuro del llano, como mensajero o enviado de Doña Bárbara.
A medida que vamos avanzando en la lectura de Blanco nocturno lo que inicialmente parecía una novela policial, queda en un segundo plano, y surge un complejo entramado en el que la búsqueda de la verdad del comisario Croce, y luego de Emilio Renzi, deja ver tras la muerte de Tony Durán, un trágico enfrentamiento familiar, que tiene profundas raíces en el pasado y del cual se han servido funcionarios corruptos para su propio beneficio. Tal como ha señalado Piglia en uno de sus textos ensayísticos: “Un cuento siempre cuenta dos historias” (...) “Un relato visible esconde un relato secreto, narrado de un modo elíptico y fragmentario” (Piglia 2000). El comisario Croce expresa claramente ese doble relato, aquello que se esconde detrás del crimen pasional que explica, aparentemente, la muerte de Tony Durán: “–Todo consiste en diferenciar lo que es de lo que parece ser...–siguió Croce–. Fijarse en algo es quedarse quieto ahí”. (Piglia 2010, p. 144)
Mientras la figura de Regina O’Connor es fuerte y activa, en ningún momento se subordina a la figura masculina del esposo, Cayetano Belladona, éste, parece desdibujarse en el rol que le correspondería como jefe de familia. En la descripción que el narrador, y sus propias hijas, hacen de él, se destaca la fragilidad de su salud y de su ánimo, luego de ser abandonado por su primera esposa, aunque al mismo tiempo, la figura de Belladona, no deja de vincularse al ejercicio del poder, sin ser propiamente una figura política:

(...) el ingeniero Cayetano Belladona, vivía retirado en la casona de la familia, aquejado de una extraña enfermedad que le impedía salir pero no controlar la política del pueblo y del partido. Era un hombre desdichado que sólo sentía devoción por sus dos hijas mujeres (Ada y Sofía) y que había tenido un conflicto grave con sus dos hijos varones (Lucio y Luca), a los que había borrado de su vida como si nunca hubieran existido. (Piglia 2010, p. 19)

Lo que sería fundamental, la transmisión del legado del padre a los hijos varones, según un esquema patriarcal de la sociedad, no es posible. Los hijos que debían ser los herederos de los bienes y del quehacer del padre, deciden tomar su propio camino, crear la fábrica de automóviles que va a llevarlos al fracaso, a la quiebra, a pesar del éxito inicial de la misma. Esa fábrica bien podría representar el proyecto de modernidad, siempre truncado, de los países latinoamericanos. En medio de la pampa y su pobreza la fábrica de los hermanos Belladona, Lucio y Luca, es un alarde extraordinario de progreso, totalmente desvinculado de la realidad que está a su alrededor.
Un factor externo, inesperado, una súbita devaluación de la moneda, que multiplicará una deuda contraída en los Estados Unidos, terminará con la hipoteca de la fábrica, y finalmente en su cierre. Los años en los cuales se sitúa la trama, los años previos al retorno de Perón al poder, son años de una gran inestabilidad en la Argentina, en el 71 en particular hay un importante déficit fiscal que obliga a varias devaluaciones de la moneda y una serie de importantes atentados terroristas contra empresarios y militares, secuestrados y luego asesinados. Lo que hace trágica tal situación en el contexto de la novela de Piglia, no es la quiebra en sí de la fábrica, sino lo que ésta desencadena entre los hermanos Belladona, quienes hasta ese momento habían tenido una relación de trabajo basada en la mutua confianza y el mutuo apoyo. Lo trágico es la traición que hacen el padre y el hermano mayor Lucio, a Luca, cuando entregan los activos a una empresa vinculada con el fiscal Cueto.
El padre, queriendo ayudarlos, hace traer de los Estados Unidos, a través de Tony Durán, unas divisas, sin declarar, que les corresponden a los hermanos, las cuales han heredado de su madre. Pero ellos ignoran esta situación, es decir, que Tony Durán ha traído el dinero que podía saldar la hipoteca. El problema viene realmente porque Cayetano Belladona, quien duda que Luca es su hijo biológico, establece una alianza con Lucio, su hijo mayor, dejando a un lado a Luca. Trayendo del pasado el viejo drama del abandono de Regina O’Connor. No olvidemos, por otra parte, como referencia cultural, la manera en que en el relato bíblico es el primogénito, el hijo mayor, el receptor principal de la heredad familiar, y quien a falta del padre debe tomar su lugar. Si bien Cayetano Belladona había criado a los dos hermanos por igual, ambos abandonados por la madre, tanto para él como para Luca hay una duda razonable sobre quién es su verdadero padre biológico.
Con el fin de la fábrica termina también el linaje masculino de los Belladona, primero Lucio y después Luca mueren trágicamente. A pesar de que tanto el padre como los hijos hacen lo indecible por salvar el patrimonio familiar finalmente nada queda de él. La historia familiar de los Belladona está marcada por el abandono de la madre de los varones, pero también por un intenso juego de poder que ha pasado de una generación a otra. Así lo expresa Sofía en una conversación con Renzi: “Nos pasamos la vida peleando por la herencia, primero mi abuelo, después mi padre y ahora nosotras (...) él unico que se mantuvo ajeno y no aceptó ningún legado y se hizo solo fue mi hermano Luca...” (Piglia 2010, p. 75). Pero esa aparente pureza de Luca, ese orgullo por hacerse solo, esos textos, que describen sus sueños, que deja como legado en las paredes de la fábrica, no evita que al final inculpe de asesinato a un inocente, Yoshio Dazai, para acceder a su herencia; pero luego se suicida, arrepentido. Como se reitera en la novela Luca “sólo perseguía un sueño”, y todos, incluyendo a su familia, lo habían derrotado, lo habían dejado solo. Podríamos decir que Luca es la personificación del héroe problemático de Lukács, en tanto busca y defiende valores auténticos en un mundo degradado, que predeciblemente le da la espalda y lo lleva a la autodestrucción.
Heredamos de nuestros antepasados, y especialmente de nuestros padres, uniones, pero también rupturas, talentos, pero también predisposiciones menos positivas, igualmente valores, creencias, modelos de conducta. En ese cruce de herencias que Cayetano Belladona y sus dos esposas entregan a sus hijos se confunden los caracteres y las actitudes, los hijos de la primera esposa terminan pareciéndose a la segunda, y las hijas de la segunda esposa, se parecen en su carácter, e incluso físicamente, a la primera, a quien ni siquiera conocieron.
La madre de las gemelas Ada y Sofía, Matilde Ibarguren, es la segunda esposa de Cayetano Belladona. Ibarguren es también el apellido materno de Eva Duarte de Perón. Si bien Matilde no tiene un rol protagónico o determinante en la novela, ella es la madrastra de los hijos varones, y se destaca de manera explícita que a pesar de no ser su madre biológica, “los varones habían heredado el carácter desquiciado de su madrastra mientras que las chicas eran iguales a la irlandesa, pelirrojas y alegres que iluminaban el aire en cuanto aparecían” (Piglia 2010, p. 20). No se trata sólo de un “carácter desquiciado”, al parecer, como lo comenta, Ada, una de sus hijas en una conversación, se la ha incapacitado legalmente: “todos saben que podemos repartir la herencia cuando queramos porque mi madre está impedida” (Piglia 2010, p.69). Pero tal como ocurre con otros asuntos en la novela, Matilde Ibarguren no está tan desquiciada como pareciera.
El segundo matrimonio de Cayetano Belladona, luego de haber sido abandonado por Regina O’Connor, es un matrimonio por conveniencia, así lo relata su hija Sofía: “–Mi padre se hacía el aristócrata y por eso la buscó a mi madre, que es una Ibarguren... –dijo Sofía– (Piglia 2010, p. 118)”. Regresamos nuevamente a la perspectiva a la que aludíamos al inicio de estas líneas, según la cual el matrimonio vendría a ser un convenio de orden mercantil, a través del cual las familias importantes se aseguraban que su vástago se casase con la hija de una familia de igual o mejor condición para resguardar el patrimonio familiar. En este caso, es el propio Cayetano Belladona quien decide buscarse una nueva esposa, de buena familia, que si pudiese cumplir con su rol de esposa, y madre, de sus hijos varones, que han sido abandonados, y de las gemelas que nacerán posteriormente. En una de las pocas escenas en las que Matilde Ibarguren aparece la encontramos con un libro en las manos, es una mujer cultivada, que ha desempeñado lo mejor posible el rol que le tocó en suerte. Todos los meses manda a pedir libros. Su hija Sofía la llama, “la lectora”, y le dice a Renzi que “solo está tranquila si está leyendo...Cuando deja de leer se pone neurasténica” (Piglia 2010, p. 186). La otra escena en la que aparece es en el entierro de Luca.

Las gemelas

Los personajes femeninos, y especialmente las gemelas Ada y Sofía Belladona, cumplen un papel central en la trama de la novela Blanco nocturno. Son el puente entre Cayetano Belladona y la sociedad, recordemos que él ya no sale de la casa donde vive. Es a través de ellas que establece el vínculo con Tony Durán, cuya presencia en el pueblo desatará el trágico final, la muerte del propio Durán y luego la muerte de los hermanos Lucio y Luca Belladona. Y será una de las hermanas, Sofía, quien irá relatando, a Renzi y a nosotros los lectores, los hechos que conducen a ese desenlace, a medida que va dando cuenta de la historia familiar, y el lado oscuro de esa historia familiar.
Desde su infancia ya las gemelas tienen un especial vínculo con el padre. Señala el narrador: “A sus hijas les enseñó su propio código moral y les dejó que hicieran lo que quisieran y las crió como si ellas fueran sus únicos hijos varones” (Piglia 2010, p. 21). Por lo tanto, no es el distanciamiento con los hijos varones, cuando los hereda en vida y abren la fábrica, lo que va a motivar la preferencia del patriarca por las hijas hembras. Desde el inicio de la novela se destaca la seducción y lo instintivo como un rasgo que caracteriza a las hermanas Belladona, y esto inclusive le da un tono, un ritmo trepidante al texto, inicialmente. Este ritmo va a cambiar luego del asesinato de Durán.
Detrás de la historia de las gemelas con Tony Durán, no hay sólo un capricho de ricas herederas por un fogoso latin lover, jugador y aventurero. La historia con Durán hay que vincularla también con el ejercicio del poder, desde dos puntos de vista. Por una parte, a medida que avanza la trama, sabemos que en realidad Durán llega al pueblo como portador de unas divisas, no declaradas, que Cayetano Belladona ha ordenado traer de los Estados Unidos, para salvar la fábrica de sus hijos. No es Durán quien seduce a las herederas argentinas para sacar provecho de su dinero, en realidad ha sido él el seducido por el negocio con el padre y por el poder de seducción de las hijas.
Una vez en el pueblo de los Belladona Durán no comprende que hay lugares a los que no debe acceder, aún teniendo dinero. Y esto, muy probablemente, es lo que determina su trágico final. Otro hubiese sido su destino si hubiese sido un rubio anglosajón, mas Durán, como señala Croce es “Un yanqui que no parecía yanqui pero era un yanqui” (Piglia 2010, p. 16). De cualquier manera no es igual un yanqui de origen pobre y puertorriqueño que un yanqui anglosajón. Cabe recordar la cita in extenso que hicimos sobre la manera en que se ubican las viviendas en el pueblo: en lo alto de las lomas viven los ricos, luego está el centro de la ciudad, donde están los negocios, los edificios públicos y del otro lado de las vías férreas “los barrios bajos donde muere y vive la mitad más oscura de la población”. Cuando Durán conoce a Cayetano Belladona, nos dice el narrador, “actuó, sin darse cuenta, como un capataz de estancia, como un arrendatario, o un puestero que se acerca, solemne y lento, a saludar al patrón”. (Piglia 2010, p. 36)
Pero, por otra parte, la relación escandalosa de Durán con las gemelas, nos lleva a la relación especular que tienen las gemelas entre sí, que esconde también una relación de poder. Parecen complementarse, en sus juegos por hacerse pasar la una por la otra y en una imagen pública avant garde pero también, a pesar de ser tan parecidas, como ocurre en los espejos, sus imágenes se contraponen, rivalizan:
“Desde chicas las hermanas Belladona fueron rebeldes, fueron audaces, competían todo el tiempo una contra la otra, con obstinación y alegría, no para diferenciarse, sino para agudizar la simetría y saber hasta dónde realmente eran iguales” (Piglia 2010, p. 21).
“Siempre era así, una contra la otra, como dos gatos metidos en una bolsa que luchan para quedar libres y escapar”. (Piglia 2010, p. 46)
Ciertamente en cuanto al afecto del padre no hay discriminación, ambas reciben el mismo afecto, la misma educación, tienen los mismos privilegios que las hacen mujeres caprichosas, voluntariosas, liberales, lo que no ocurre con sus hermanos varones. Es difícil distinguirlas a simple vista, sólo la madre puede hacerlo. La complicidad parece marcar la relación entre ellas. Sofía no se va con Renzi porque debe cuidar de su hermana. Terminan compartiendo el amante puertorriqueño y compartiéndose entre sí. Lo que es bastante escandaloso. Sin embargo, al profundizar la trama de la novela, notamos, que como ocurre con el cuerpo humano, las gemelas no son tan idénticas. Si usted se ve de perfil esa simetría aparente no es tal. El lado derecho no es exactamente igual al izquierdo. Así ocurre con las gemelas Belladona.
El desenlace de la trama, que conlleva la mentira y la impunidad que condenan a un inocente, Yoshio Dasai, por un crimen que no cometió, tiene como figura central al fiscal Cueto, quien con anterioridad había sido el abogado de confianza de los Belladona y había empujado al padre y al hijo mayor a entregar la mayoría accionaria a una empresa de un socio suyo, dejando a un lado al hijo menor, Luca. Pero además el fiscal Cueto mantiene una relación erótico sentimental con Ada Belladona. Aún cuando parece despreciarlo, según dice su hermana Sofía a Renzi, Ada no puede resistirse al llamado de Cueto, a pesar de haber sufrido un accidente que le lesiona una pierna al montarse en una moto con él. Es entonces cuando Ada muestra su faz débil. Es evidente el poder y la influencia que ha cobrado Cueto en el pueblo. También se evidencia el estrecho vínculo del fiscal Cueto con los medios, la prensa, la televisión. Se vale de cualquier estrategia que pueda colocarlo como portador de la verdad y de la justicia para lograr sus fines. De allí la insistencia del comisario Croce en señalar la diferencia entre lo que es y lo que parece ser, que intenta poner a Cueto en evidencia, sin lograrlo.

Ricardo Piglia


Blanco nocturno


viernes, 12 de agosto de 2011

LAZOS DE FAMILIA EN BLANCO NOCTURNO DE RICARDO PIGLIA (1)

LAZOS DE FAMILIA EN BLANCO NOCTURNO DE RICARDO PIGLIA
Beatriz Alicia García

El que escribe sólo puede hablar de su padre o de sus padres y de sus abuelos, de sus parentescos y genealogías.
(Ricardo Piglia, “En otro País”)

Memoria familiar y memoria colectiva

Entendemos el concepto de familia como “la célula base de la sociedad”. Pero, ¿qué implicaciones tiene tal aseveración?¿De qué manera la familia es un eslabón que vincula al individuo con la sociedad o a la sociedad con el individuo? La configuración de nuestra identidad como individuos está estrechamente vinculada con nuestro crecimiento y formación en el núcleo familiar, pero de igual manera esa formación va a afectar nuestro comportamiento social, los roles que desempeñamos como ciudadanos; y el contexto social, a su vez, influye en la dinámica familiar y en los roles que desempeñamos en el hogar. Expresa Méndez Castellano (1996: 47):

La familia, como grupo social primario, tiene sus características propias. Su estructura se inserta en la estructura social manteniéndose dentro de una interrelación de influencias mutuas. Es considerada como una micro-sociedad donde se aprenden los primeros hábitos fundamentales para la vida y su papel es muy importante en la formación de la personalidad integral del hombre. La familia, con arreglo a sus posibilidades, debe satisfacer las necesidades básicas de sus miembros y es el medio fundamental para transmitir a las nuevas generaciones los valores culturales, morales y espirituales y las costumbres y tradiciones características de cada sociedad.

Nuestras nociones de libertad y seguridad, por ejemplo, dos nociones fundamentales que adquirimos en el contexto familiar, van a influir en nuestras acciones y nuestra conducta, van a influir en la manera en que nos ponemos límites en nuestro trato con los otros (Rízquez 2000).

Lo que no es siempre evidente es el vínculo entre los lazos de familia y el ejercicio del poder en la sociedad; de qué manera, los padres, además de legar bienes, hábitos, comportamientos y valores, pueden legar a sus hijos el ejercicio del poder, que afecta la toma de decisiones en el ámbito social. No me refiero aquí necesariamente al ejercicio del poder político o al nepotismo, sino a la influencia que grupos de poder económico pueden ejercer en su contexto social. En el ámbito colonial de la América Hispana sólo el propietario, el dueño de la tierra, podía formar parte del Cabildo; por lo tanto el matrimonio, la conformación del núcleo familiar se piensa y organiza como “una forma de empresa muy ligada a las necesidades económicas” (...) “del siglo XVI al XIX las familias ejercen mucha influencia sobre la política tanto a nivel local como nacional”. (González y Tuñón 1997, p. 19). Los grupos de influencia, los que podían tomar decisiones, estaban conformados por los propietarios de la tierra; porque en una sociedad básicamente agrícola, el patrimonio social, e incluso nacional, está en la tierra, y lo que ésta produce. En el contexto rural, del campo, esto sigue siendo así, los grandes propietarios son los hacendados, los dueños de la tierra.

En ese contexto hay que ubicar a los personajes protagónicos de Blanco nocturno y la trama que se teje entre la familia Belladona y el asesinato de Tony Durán. Sofía Belladona lo dice expresamente mientras relata su historia familiar a Emilio Renzi, periodista de la capital, a quien había conocido cuando era estudiante: “Porque no hay nada que heredar salvo la muerte y la tierra. Porque la tierra no debe cambiar de mano, la tierra es lo único que vale, dice siempre mi padre, y cuando mi hermano se negó a aceptar lo que era de él, empezaron los conflictos que llevaron a la muerte de Tony”. p. 75

En la presente reflexión sobre la novela de Ricardo Piglia, Blanco nocturno, me interesa destacar el modo en que la herencia familiar, entendida como legado, es decir, “como deuda que el heredero contrae con sus antecesores” (Saraceni 2008, p. 14) y ante la cual debe responder; va configurando también el quehacer y el espacio público; cómo la esfera privada y de los afectos se ve afectada por los vínculos y contratos que se establecen con la sociedad. En la novela de Piglia, detrás de lo que inicialmente parece un crimen pasional, subyace un complejo entramado en el que se entrelazan los lazos que unen, o desunen, a la familia Belladona, y su vínculo con los intereses económicos y políticos, del pueblo que han fundado. Más allá de los bienes materiales heredados, que los Belladona han recibido de una generación a otra, que motivan el nudo de la trama; lo que la hace interesante, y compleja, es lo que las mellizas, y sus hermanos, han asumido de ese legado, de qué manera lo hacen suyo, aún rechazándolo.

La importancia del legado familiar es también un referente fundamental en la novela de Piglia Respiración artificial (Piglia 1980). Los personajes protagónicos Marcelo Maggi, Emilio Renzi, y el senador, Luciano Ossorio, están unidos por lazos consanguíneos, pero también por una memoria familiar común; un antepasado, Enrique Ossorio, ligado a la historia argentina, que Maggi proyecta biografiar, surge como un eslabón que une a tres generaciones, que no se conocen, que no han estado juntos, pero que comparten, o podrían compartir un ideal, que Maggi vincula con la utopía.
El vínculo entre Maggi y Renzi no es directo, comienza a través de la comunicación por correspondencia entre tío y sobrino, Maggi necesita un interlocutor para su proyecto biográfico, pero también un heredero que lo asuma, porque él no puede continuarlo y no tiene hijos, herederos directos. Maggi, al igual que su biografiado, Enrique Ossorio, es un desterrado, alguien que ha sido condenado al ostracismo como manera de expiar una culpa. En una suerte de juego de espejos se van entrelazando las vidas de Enrique Ossorio, Maggi y Renzi, que nunca se verán, se unen intertextualmente; Maggi comparte con Renzi textos de Ossorio y luego desaparece: “El desterrado es el hombre utópico por excelencia, escribía Ossorio, me escribe Maggi, vive en la constante nostalgia del futuro” (Piglia 1980, p. 56, el subrayado es nuestro). Lo que hemos heredado de lo que somos es siempre una promesa, una posibilidad, que puede cumplirse o no, y que a nuestra vez dejamos a las generaciones futuras, junto con nuestra sangre o a través de nuestros proyectos y nuestras acciones.

Lo destacable en Respiración artificial es el modo en que ese legado llega, a través de la escritura, la metaficción. Maggi le escribe a Renzi sobre su proceso de escritura y nosotros como lectores somos también narratarios de ese discurso. A la inversa de la perspectiva mimética de lo literario, en Respiración artificial, Enrique Ossorio relata que ha empezado a encontrar en el mundo “real”, escenas previamente leídas en la literatura: es la vida la que imita al arte. Escribe Ossorio: “Pienso: he descubierto una incomprensible relación entre la literatura y el futuro, una extraña conexión entre los libros y la realidad. Tengo solamente una duda: ¿Podré modificar esas escenas?¿Habrá alguna forma de intervenir o sólo puedo ser un espectador?” (Piglia 80, p. 125).

En Blanco nocturno Emilio Renzi reaparece como personaje y de igual modo lo hace como receptor-escucha, de las elucubraciones de Croce, quien también necesita un interlocutor para ordenar sus ideas. A través de Renzi se establecen vínculos intertextuales entre ambas novelas de Piglia, Respiración artificial y Blanco nocturno. Pero en Blanco nocturno, a Renzi, como narrador, no le queda más opción que ser precisamente sólo testigo-espectador ante los hechos trágicos que protagoniza la familia Belladona. Como en el drama griego clásico o shakespeareano nada puede hacerse contra el fatum, la cadena de trágicos desenlaces.
La identidad, el sentido de pertenencia, vinculados al legado familiar, son un tema fundamental en Blanco nocturno; al igual que en otras destacadas novelas de la literatura latinoamericana, Doña Bárbara o La Trepadora de Rómulo Gallegos, Cien años de soledad de García Márquez, La casa de los espíritus de Allende. La confrontación con ese legado inexorablemente traspasa la esfera de lo privado y puede vincularse con el ejercicio de la ciudadanía, pero también con algo quizá menos tangible, la configuración de un imaginario cultural. Como señala Saraceni (2008: 16) es importante destacar “el vínculo entre memoria individual y memoria colectiva”.
Este vínculo se señala expresamente en la novela, mientras una de las mellizas, Sofía, conversa con Emilio Renzi. En este caso, los Belladona, no sólo han adquirido la memoria colectiva del lugar, sino que han conformado con sus actos una parte importante de esa memoria colectiva, que los habitantes del pueblo han hecho leyenda, entendiendo leyenda como un relato que ficcionaliza y magnifica determinados hechos transformándolos en patrimonio cultural de un lugar: “Muchas veces Sofía había comprobado que la historia de su familia era un patrimonio de todos en la zona –Un cuento de misterio que el pueblo entero conocía y volvía a contar pero nunca lograba descifrar completamente– (Piglia 2010, p. 54). [en cursiva en el original] No es un detalle casual que Rosa Echeverry, emparentada con los Belladona por la rama de los O’Connor, sea la archivista del pueblo, quien guarda la memoria de los hechos más importantes acaecidos, incluyendo los anónimos, que dejados azarosamente en lugares públicos, buscan sacar a la luz las verdades que han ocultado las historias oficiales de los hechos.
Pertenecer a una genealogía, inscribirse en ella, no sólo implica tener determinadas características físicas o de personalidad, también tiene que ver con formar parte de una tradición cultural; asumir, o rechazar, diversas prácticas, representaciones, valores, creencias, ritos, a los que a nuestra vez, agregamos otros. En la continuidad de una genealogía se unen pasado, presente y futuro. En el caso de los hermanos Belladona, personajes protagónicos de Blanco nocturno, implica también, la pertenencia a un lugar geográfico, el vínculo con la tierra, la defensa de un patrimonio que se vincula a ella. Es por ello que Cayetano Belladona envía a sus hijas a la capital para que estudien Agronomía y surgen los conflictos con los hijos varones, que básicamente, heredan del abuelo italiano, Bruno, “la desconfianza del campo y el gusto por las máquinas” (Piglia 2010, p. 147).

No hay que olvidar que el abuelo ingeniero, Bruno, es un fundador, inicia una genealogía en un lugar desierto de la pampa argentina, pero no trae consigo una genealogía propia, nunca conoció a sus padres, no tiene un legado ante el cual responder, una herencia que le de arraigo, y es con él que va a criarse Luca, al ser abandonado por la madre: “El pequeño Belladona. Era hijo de sí mismo; el primer hombre sin padre, en la familia. Bruno lo llamaron porque era morocho, parecía africano”. (Piglia 2010, p. 91)

Entre los habitantes del pueblo, y esto incluye, por supuesto, a la familia Belladona, encontramos una red de vínculos en los que pareciera predominar la complicidad, sin embargo, luego del asesinato de Tony Durán, cuando Emilio Renzi entrevista a sus moradores, da cuenta, ya no de la “barbarie” rural, que unificaba a los pobladores en un retrato único, desdibujándolos, en la obra de los escritores criollistas del siglo XIX o inicios del XX, sino de una cartografía en la que las diferencias sociales son notorias:

Los pobladores principales viven en lo alto de las lomas; después en una franja de unas ocho cuadras está el llamado centro histórico con la plaza, la municipalidad, la iglesia y también la calle principal con los negocios y las casas de dos pisos; por fin, al otro lado de las vías del ferrocarril, están los barrios bajos donde muere y vive la mitad más oscura de la población. (Piglia 2010, p. 14)

De igual modo se evidencian las alianzas o traiciones que se vinculan al Capital, a la posibilidad de participar en jugosos negocios vinculados al capital extranjero. El pueblo de los Belladona, ni es la Arcadia de Rousseau ni el salvaje territorio al que hay llevar la luz de la civilización. Es un territorio con sus propias leyes, que vive “en dos realidades”
:
La gente de campo vivía en dos realidades, con dos morales, en dos mundos, por un lado se vestían con ropa inglesa y andaban por el campo en la pick-up saludando a la peonada como si fueran señores feudales, y por otro lado se mezclaban en todos los chanchullos sucios y hacían negociados con los rematadores de ganado y con los exportadores de la Capital. Por eso cuando llegó Tony supieron que había otra partida en juego además de una historia sentimental. ¿Para qué iba a venir hasta aquí un norteamericano si no era para traer plata y hacer negocios? (Piglia 2010, p. 73)
[Renzi] Empezó con la descripción del pueblo porque se dio cuenta de que ése era el tema que iba a interesar en Buenos Aires, donde casi todos los lectores era como él y pensaban que el campo era un lugar pacífico y aburrido con paisanos con gorra de vasco que sonríen como tarados y le dicen a todos que sí. Un mundo de gente campechana que se dedicaba a trabajar la tierra y eran leales a las tradiciones gauchas y a la amistad argentina. Ya se había dado cuenta de que todo eso era una farsa, en una tarde había escuchado mezquindades y violencias peores a las que podía imaginar. (Piglia 2010, p. 115)

[“Lazos de familia en Blanco nocturno de Ricardo Piglia” Continuará en próximos posteos]

Bibliografía

Bibliografía directa:

Piglia, Ricardo. 1980. Respiración artificial. Cuba: Casa de Las Américas.

Piglia, Ricardo. 2000. Formas breves. Barcelona: Anagrama.

Piglia, Ricardo. 2010. Blanco nocturno. Barcelona: Anagrama.

Otras fuentes bibliográficas:

Bratosevich, Nicolás. 1997. Ricardo Piglia y la cultura de la contravención. Argentina: Teruel.

Cappelletti, Ángel. . Positivismo y evolucionismo en Venezuela. Caracas: Monte Ávila Editores.

Fornet, Jorge. 2000. Valoración múltiple Ricardo Piglia. La Habana/Bogotá: Casa de las Américas/Instituto Caro y Cuervo.

Gallegos, Rómulo. Doña Bárbara. Caracas: Fundación Ayacucho.

González Montes, Soledad y Julia Tuñón (comps.). 1997. Familias y mujeres en México. México: El Colegio de México.

Hurtado de Barrera, Jacqueline. 2003. Aproximación a una tipología de la estructura de las familias caraqueñas de menores recursos. Universidad Central de Venezuela. Facultad de Ciencias Económicas y Sociales.

Iser, Wolfgang. 1987. “El proceso de lectura: enfoque fenomenológico”. En: Mayoral, José Antonio (comp.). 1987. Estética de la recepción. Madrid: Arco Libros.

Méndez Castellano, Hernán et al. . 1996. Estudio Nacional de Crecimiento y Desarrollo Humano de la República de Venezuela. Caracas: Ministerio de la Secretaría. Fundacredesa.

Pons, María Cristina.1998. Más allá de las fronteras del lenguaje. México: Universidad Nacional Autónoma de México.

Rísquez, Fernando. 2000. “Dinámica familiar”. En: Familia: un arte difícil. Caracas: Fundación Venezuela Positiva.

Saraceni, Gina. 2008. Escribir hacia atrás Herencia, lengua, memoria. Argentina: Beatriz Viterbo Editora.


miércoles, 27 de julio de 2011

Caracas

CARACAS, A PESAR DE TODO

Caracas,
como algunas señoras
de cierta edad,
tuvo mejores tiempos,
fue una promesa moderna,
un lugar amable;
que uno advierte aún
en ciertos parques
y jardines,
que uno rememora
en los valses de Lauro
y en el cortés saludo
de algunos muchachos
educados.
Caracas tiene
sobre todo
una profunda vocación
de sobrevivencia.
Mientras espera mejores días
sigue reposando
a los pies de la montaña,
su guardiana,
sigue recibiendo visitas,
es decir, viajeros,
e inventa festejos
para poblar sus calles
con la sonrisa, aún fácil,
de sus habitantes.
Caracas
no deja de reinventarse,
Caracas es conmovedoramente
joven, optimista,
llena de luz.
Caracas, inesperadamente,
se resiste
a ser solamente
esa calumnia
que tenemos en la punta de la lengua
en algún atasco de las 6 pm,
en alguna página insolente
del periódico de hoy.

julio 2011
a Caracas en su aniversario


Beatriz Alicia García

martes, 26 de julio de 2011

Palabra de León domingo 31 de julio

Este domingo a las 11:30 am estaré coordinando a un grupo de amigos para participar en las actividades de Homenaje a Caracas que la dramaturga Inés Muñoz Aguirre ha planificado para la Alcaldía Mayor bajo el nombre Palabra de León. Mi grupo leerá sus textos en la GALERIA TEMPLARIOS, CALLE EL RETIRO, AV. BOYACA Y VENEZUELA N 34. EL ROSAL. Están cordialmente invitados. Para mayor información sobre el evento pueden visitar el blog: http://publicartecaracas.blogspot.com Participarán en mi grupo:

Astrid Lander
Ana María Velázquez
Arlenis Olivero
José Antonio Parra
Flavia Pescifeltri
Juan Carlos Ballesta
Claudia Sierich
Hildegart Acosta
Mariela Casal
Daniela Guarisma
y Beatriz Alicia García

Mark Strand

Mancha lunar

a Donald Justice

La azulada, pálida
faz de la casa
asciende sobre mí
como un muro de hielo

y el distante,
solitario
aullido de un búho
flota hacia mí.

Entrecierro los ojos.

Sobre la oscura
humedad del jardín
flores se mecen
de un lado a otro
como pequeños globos.

Los solemnes árboles,
cada uno sepultado
en una nube de hojas,
parecen perdidos en sueños.

Es tarde.
Me recuesto en la hierba,
fumando un cigarrillo,
sintiéndome cómodo,
fingiendo que el fin
será así.

La luz de la luna
cae sobre mi piel.
Una brisa
circunda mi muñeca.

Vago.
Tiemblo.
Sé que pronto
vendrá el día
para lavar la mancha
blanca de la luna,

que caminaré
bajo el sol de la mañana,
invisible,
como todos.

Mark Strand

(traducción Beverly Pérez Rego)

Mark Strand nació en Summerside, Canadá, 1934. Es considerado una de las voces esenciales de la poesía en lengua inglesa contemporánea. Su obra abarca diez libros de poesía, varios volúmenes de narrativa, ensayo, monorafías, crítica de arte y cuentos infantiles. Ha traducido a Rafael Alberti y Carlos Drummond de Andrade. En la actualidad vive en New York, donde es profesor en la Columbia University.

viernes, 8 de julio de 2011

"ESCRIBIR" JUAN LISCANO

Tal día como ayer, 7 de julio, pero de 1914, nació el poeta, ensayista, editor y promotor cultural, Juan Liscano. Para recordar su obra compartiré con los lectores de la "Bitácora para lugares reencontrados" el poema "Escribir" que he tomado de su libro "El origen sigue siendo":

ESCRIBIR

No escribas sino desde el fondo
de la memoria del silencio.

Las palabras nacieron en el silencio.

Están hechas de maternales silencios
y de sonidos patriarcales,
linaje de luces y de sombras,
de hablas y escrituras.

El silencio asistió al mundo naciente
antes de las palabras,
lo amamantó, limpio las excrecencias,
sopló sobre las aguas, dentro de las cuevas.
Las piedras pertenecen a aquella edad vencida.

Después, el silencio pobló la vegetación.
Los helechos recuerdan aquel tiempo.

El agua y los hielos nos engendraron.
Naciste en el silencio.
Regresarás a él.

No escribas los días y las noches,
la lluvia, el viento, la ciudad,
los semejantes
sino después de abrir los ojos del silencio,
después de hablar hacia adentro,
después de silenciar tu pensamiento
domando las imágenes del vacío,
mediadora entre lo pensado y el que piensa.


Juan Liscano

martes, 28 de junio de 2011

Taller vacacional de cuento

Ya están abiertas las inscripciones para taller vacacional ¿Cómo se escribe un cuento? que dictaré en la Casa Uslar Pietri durante 4 semanas los sábados de 2 a 4 pm. Para mayor información escribir a Cristina Falcón casauslarpietri@gmail.com o llamar al teléfono 7302571

Beatriz Alicia García

Belkys Arredondo Olivo

El Llamado de los grillos de Belkys Arredondo Olivo

En la reciente Feria del libro celebrada en la plaza Altamira la poeta, periodista y editora venezolana Belkys Arredondo Olivo presentó su más reciente libro de poemas, publicado por BId & co, "El llamado de los grillos". En su lirismo regresan los ecos de la memoria, y el olvido, entretejidos, con ese lenguaje y esa voz que ya le son propios, donde la hondura se busca en la palabra y los sitios cotidianos iluminándolos. Comparto con los posibles lectores de este blog algunos de los textos de Belkys:

"Olvidar y florecer. Florecer y olvidar; es todo.
El resto, ojos tristes y descripciones de un viaje".

Yehuda Amijai


Siempre esperamos.
Miramos los objetos brillantes,
suspendemos la misión inacabada
y esperamos.

Salimos a los balcones
vemos el asfalto e imaginamos
los regresos de quien nunca partió.

Escribimos en el aire
en los ojos de la muñeca del viandante
en las cajas ausentes que rara vez tocamos.

Recorremos el pasillo de la unión
decimos no lo olvidaremos
y escribimos.


&&&


Una sombra de hormigas cubre las hojas.
El cuaderno tropieza
rechina, se escurre, brilla
y curvo los días con escudo de plata
para que reverdezcan las palabras.


&&&


En los columpios del alba
no dejes que el agua caiga.

El viento barre la ciudad.
El vacío es una niña que sonríe.
Se abre de palmo,
se levanta.


&&&


Augura el grillo.

Mientras canta la copa se llena
la gota del vino y el pájaro.

Ésta no es la última habitación.

Prendo calas blancas
y veo caer la tarde
en lo permanecido.



BELKYS ARREDONDO OLIVO

"El llamado de los grillos", Caracas: Bid & co. 2010

lunes, 20 de junio de 2011

Poemas de Vahé Godel

Me disculpo por un largo silencio, pero mi agenda ha estado frenética y cuando voy a internet me atrapan otros asuntos. Comparto con ustedes un interesante poeta suizo, Vahé Godel, que fue traducido para nosotros por el extraordinario poeta venezolano, ya desaparecido, Alfredo Silva Estrada:

AL LLEGAR LA NOCHE

Al llegar la noche
las tribus desarmadas
afluyen hacia el centro
los vehículos
se aglutinan suavemente
al fondo de las calles
el asfalto rumia
los reveses transparentes
de un verano sin nubes
los remates se evaporan
vencida
la ciudad se abre las venas.

(de "Señas particulares", 1969)

ESTA NOCHE UN PÁJARO ARDE

Esta noche un pájaro arde
los cuchillos se encabestran
mi esposa sin bozales roe tierras adentro
mis hijos ahuecan la misma cama

esta noche lobo blanco
amotino las galaxias
rozo al fondo de un lago el anillo del coliseo

y trituro el vacío

(de "Señas particulares", 1969)

ARDO

Ardo
por deslumbrarme
por abalanzarme
sobre mi presa

-por morder
el polvo

(de "Copas oscuras", 1974)

Quemando todas las estaciones ferroviarias
devorando las distancias por sus dos extremos
mis ojos de guardaagujas se extravían
en la enceguecedora red de lo invisible

(de "Itinerarios", 1977)

martes, 22 de marzo de 2011

Antonieta Madrid

Poemas de Antonieta Madrid

NAMING DAY BY DAY/NOMENCLATURA COTIDIANA

VII

I draw in the air
your angry face
your tight lips
your clenched fist
your accomplice shell
your suicide tears
your laugh in crisis
This way You are Palpable...


Dibujo en el aire
tu cara iracunda
tus labios apretados
tus manos dispuestas al ataque
tu costra cómplice
tus lágrimas suicidas
tu risa en crisis
En esa dimensión Eres palpable.


XXVIII

And
There I stood
Watching the incessant parade of corpses pass by
Owning
On a paper throne
Crowned with a mobile of phosphorescent fish
Sneezing over my scars
Ruminating the shame of having dreamed.


Y
Allí me quedé
Viendo pasar el incesante desfile de los muertos
Poseyente
En un trono de papel
Coronada con un móvil de peces fosforescentes
Estornudando sobre mis cicatrices
Rumiando la vergüenza de haber soñado.



ANTONIETA MADRID

Antonieta Madrid. Escritora y diplomática venezolana,reconocida por sus textos narrativos, que le han ganado importantes premios: Premio Interamericano de Cuento 1971 por "Psicodelia"; Premio Municipal de Literatura 1974, por su novela "No es tiempo para rosas rojas"; Premio Bienal de Literatura José Rafael Pocaterra 1984 por su novela "Ojo de pez"; Primer Premio de Ensayo Fundarte 1989 por "Novela Nostra"; finalista en el Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos 1991 con su novela "Ojo de pez2 y en el Concurso de cuentos de El Nacional 1981, con "Feeling". La selección de textos poéticos que he copiado pertenece a su único libro de poemas publicado "Naming day by day/Nomenclatura cotidiana", el cual escribió en Iowa, donde participó en 1970 en el The University of Iowa International Writing Program. Antonieta Madrid ha ejercido también la docencia en la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas. Este libro puede ser consultado en la Biblioteca Isaac Pardo de la Casa Rómulo Gallegos.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Recital este domingo

Este domingo, 27 de febrero estaré leyendo poemas con algunos amigos: Alexis Romero, Cinzia Ricciuti, Alfredo Herrera Salas, Georgina Ramírez y Keila Vall. El recital se llevará a cabo en la librería Kalathos (Galpones de Los Chorros) a partir de las 11 am.

La poeta Luz Machado

La casa por dentro

La casa necesita mis dos manos.
Yo debo sostener su cal como mis huesos,
su sal como mis gozos,
su fábula en la noche
y el sol ardiendo en mitad de su cuerpo.
Deben dolerme las cortinas y sus gaviotas
muertas en el vuelo.
Conmoverme el jardín y su antifaz de flores dibujado,
el ladrillo inocente acusado
de no haber alcanzado los espejos,
y las puertas abiertas para las recién casadas
con su rumor de arroz creciendo bajo el velo.
Debo atender su réplica del universo,
la memoria del campo en los floreros,
la unánime vigilia de la mesa,
la almohada y su igualdad de pájaros dispersos,
la leche con el rostro del amanecer bajo la frente
con esa yerta soledad de una azucena
simplemente naciendo.
Debo quererla entera, salida de mis manos
con la gracia que vive de mi gracia muriendo.
Y no saber, no saber que hay un pueblo de trébol
con el mar a la puerta
y sin nombres
ni lámparas.


LUZ MACHADO

Poeta, ensayista y diplomática venezolana (1916-1999). En 1946 se le otorgó el Premio Municipal de Poesía por su libro "Vaso de resplandor" y en 1987 el Premio Nacional de Literatura. Poemarios: Ronda (1941), Variaciones en tono de amor (1943), Vaso de resplandor (1946), Poemas (1948), La espiga amarga (1950), Poemas (1951), Canto al Orinoco (plaq. 1953), Sonetos nobles y sentimentales (1956), Cartas al señor Tiempo (1959), La casa por dentro (1965), Poemas sueltos (plaq. 1965), Sonetos a la sombra de Sor Juana Inés de la Cruz (1966), La ciudad instantánea (1969), Retratos y tormentos (1973), Soneterío (1973), Palabra de honor (1974), Poesía de Luz Machado (antol. 1980), A sol y a sombra (1992), Libro del abuelazgo (1997).

jueves, 17 de febrero de 2011

Taller de literatura fantástica

La amiga Iliana Gómez Berbesí va a dictar curso sobre Literatura Fantástica en la Escuela de Escritores (Ecrea). Es un curso excelente, lo tomé meses atrás. Para mayor información visita

http://www.escueladeescritores.org.ve/

Rosario Castellanos

Textos de Rosario Castellanos

Uno recibe su vida para hacerla. Elige una figura que va desarrollándose en cada acto, en cada abstención, en cada propósito.


Escribir es dar una forma a la experiencia, un ritmo a la temporalidad, un orden al caos, una interpretación a lo abstruso. Escribir es transformar lo azaroso en legítimo, lo gratuito en necesario.


Escribo porque yo, un día, adolescente,me incliné ante un espejo y no había nadie. ¿Se da cuenta? El vacío.

MEDITACIÓN EN EL UMBRAL

No, no es la solución
tirarse bajo un tren como la Ana de Tolstoy
ni apurar el arsénico de Madame Bovary
ni aguardar en los páramos de Ávila la visita
del ángel con venablo
antes de liarse el manto a la cabeza
y comenzar a actuar.
Ni concluir las leyes geométricas, contando
las vigas de la celda de castigo
como lo hizo Sor Juana. No es la solución
escribir, mientras llegan las visitas,
en la sala de estar de la familia Austen
ni encerrarse en el ático
de alguna residencia de la Nueva Inglaterra
y soñar, con la Biblia de los Dickinson,
debajo de una almohada de soltera.

Debe haber otro modo que no se llame Safo
ni Mesalina ni María Egipciaca
ni Magdalena ni Clemencia Isaura.

Otro modo de ser humano y libre.

Otro modo de ser.




ROSARIO CASTELLANOS

poeta, narradora, ensayista y promotora cultural mexicana (1925-1974). La mujer, los roles femeninos, fueron eje central de algunos de sus textos, en los cuales cuestionó los estereotipos vinculados a lo femenino. También tuvo interés por los derechos de las etnias indígenas. Entre sus compilaciones de poesía pueden mencionarse: Trayectoria del polvo (1948), Apuntes para una declaración de fe(1949), De la vigilia estéril (1950), El rescate del mundo (1952), Lívida luz (1960), Materia memorable (1969). Para mí se convirtió en una referencia importante cuando leí, además de sus textos poéticos, su libro "Mujer que sabe latín..." (1973), un libro que rescata la obra de diversas mujeres escritoras.

domingo, 6 de febrero de 2011

Recital poético en Kalathos

El domingo 27 de febrero de 2011 tendré el gusto de recitar en la librería Kalathos ubicada en los galpones de Los Chorros (Periférico Caracas) juntos a varios amigos poetas: Cinzia Ricciuti, Alexis Romero, Alfredo Herrera Salas, Georgina Ramírez y Keila Vall De la Ville.

Beatriz Alicia García

Beverly Pérez Rego

Poema de Beverly Pérez Rego

Toma mi cuerpo:
tu ala oscura me viste
con ajustado rigor.

Toma mi nombre:
las voces que me llamaban
han callado para siempre.

Toma mi vida:
por certeza de tenerla
he errado el camino.

Miedo tengo de escribirme
y dar en el blanco.


Beverly Pérez Rego

(El presente poema fue tomado de "Libro de Cetrería" (1994)en Poesía reunida. Monte Ávila Editores Latinoamericana, Caracas, 2006)

lunes, 31 de enero de 2011

VINO ANTIGUO

Me, phila psycha, bion athanaton
speude, tan d'emprakton
anthei machanan.

(Píndaro, Piticas, III, vv. 109-110)

Alma mía, no aspires a la vida inmortal
pero agota el campo de lo posible


Alma mía, no quieras más que lo que amas.
Mira este objeto lento y luminoso
que tengo entre mis dedos. Es un dibujo
sobre una copa griega donde hubo vino.
Nada hay más semejante al destino de un hombre
que el destino de un héroe.
Lo heroico es tener destino.
Mira en este dibujo griego,
el milagro fijo y móvil de lo humano,
transitorio y perfecto, como un guijarro.

En esta copa, alma mía,
semejante a un cráneo
cabe toda la sangre de la humanidad
porque en un solo cráneo caben todos los hombres.
Se parece a una antigua caverna
porque en una caverna sueñan todos los hombres.

Bebe, alma mía, de este vino humeante
hecho de soledad, de trabajo en la carne, de meses
y años pisoteando sobre el lagar
la materia de los recuerdos.
Sobre el cráneo donde brilla reclusa
toda la ancha esperanza de mi vida.

No quieras más que lo que amas.
Muere, si es necesario,
por defender la carne de mis años;
anda al ruedo donde bostezan los leones
sedientos y tiránicos
y pon tu poesía bajo la uña del tiempo.
Cae, en fin, como un hombre
hasta la soledad donde están todos.

Ludovico Silva

(De "Tenebra", 1964)


Ludovico Silva. Caracas 1937-1988). Poeta y filósofo venezolano. También ejerció la docencia

miércoles, 26 de enero de 2011

William Carlos Williams

JANUARY MORNING (MAÑANA DE ENERO)

(fRAGMENTO)


I
I have discovered that most of
the beauties of travel are due to
the strange hours we keep to see them:

the domes of the Church of
the Paulist Fathers in Weekhawken
againt a smoky dawn -the heart stirred-
are beautiful as Saint Peters
approached after years of anticipation.

XV
All this-
was for you, old woman.
I wanted to write a poem
that you would understand.
For what good is it to me
if you can't understand it?
But you got to try hard-
But-
Well, you know how
the young girls run giggling
on Park Avenue after dark
when they ought to be home in bed?
Well,
that's the way it is with me somehow.

WILLIAM CARLOS WILLIAMS
USA (1883-1963)

(traducción José Coronel Urtecho y Ernesto Cardenal, Colección Visor de Poesía)

I

yo he descubierto que la mayor parte de
las bellezas del viaje se deben a
las horas extrañas en que las vemos:

las cúpulas de la iglesia de
los Padres Paulinos en Wechawken
contra un alba humeante -el corazón agitado-
son bellas como las de San Pedro
divisadas después de años de anticipación.

XV

Todo
Todo esto-
fue por ti, vieja.
Quise escribir un poema
que tú pudieras entender.
Porque ¿a mí de qué me sirve
si tú no lo entiendes?
Pero tienes que esforzarte-
Pero-
Bueno, ¿tú sabes cómo
las muchachitas retozan riendo
en Park Avenue de noche
cuando debieran estar en casa acostadas?
Bueno,
es lo mismo conmigo en cierta manera.

domingo, 16 de enero de 2011

細江英公 展示会「さくら空間」 白石かずこ語り in 實相寺

Poemas de Kazuko Shiraishi

LEÑA

en el interior del planeta se apila la leña
allí viven montañeses
el hermano menor medio sordo
la carne de la hermana mayor sensible
el padre vuelto eternidad
la madre arrostra los descendientes
en el interior de ese planeta se apila la leña
la entraña ardiente de la hermana aguarda
la creciente la nívea parte de su hermano
en una historia escalofriante
sólo el fuego es esperanza o melancolía
hermano y hermana apilan la leña
en el interior que arde

en la cabaña en la cima de la colina
dentro de la sangre de la carne
se sigue consumiendo y apilando la leña de un tiempo invisible

SER

hubo algo parecido en una cuesta amazónica
y en las selvas indonesas
voló ligeramente sobre sus alas
desvaneciéndose como vértigo después del segundo viaje separados
pero existió realmente
como luz y sombra en cópula súbita
estremecido levemente el aire silencioso.


KAZUKO SHIRAISHI
Destacada poeta japonesa contemporánea nacida en Vancouver, Canadá (1931). Su familia retorna a Japón en 1938. Se ha destacado en su poesía la influencia del ritmo sincopado del jazz, Shiraishi fue amiga de Coltrane y se la ha vinculado con la generación Beatnik. En lo que he podido leer de la autora encuentro como un eje importante lo humano ancestral y trascendente, aquello que nos une ancestralmente como especie. Una traducción de su libro "Meditación ardiente y otros poemas" puede encontrarse en Caracas en las Librerías del Sur editado por El Perro y La rana, colección Poesía del Mundo. De esa traducción tomo los dos textos que aquí comparto. Shiraishi empezó a escribir poesía a los dieciseis años, sus primeros textos fueron publicados en la revista Vou. En 1951 fue publicado su primer libro "La ciudad donde llovieron huevos", desde entonces ha publicado varios títulos "L ajugada del tigre", "No vengas luego", "Esta noche obscena", "La estación de la santa perversidad" y "Tribu de arena". Acompaño estos textos con un video que encontré en Youtube, está en japonés, no tiene traducción, pero me pareció interesante para ver a la poeta y escuchar textos suyos en su idioma original. Puedes encontrar más textos suyos en internet. Pon su nombre en un buscador.

sábado, 8 de enero de 2011

Anne Sexton

ENTONCES SI PODEMOS HABLAR DE LOCURA ANNE?

Debiste haber tenido tanto de Monet
y de bosques encendidos,
ser la gran inundación
que termina con los ferrocarriles y los levanta
de nuevo en la sonrisa. Como un faro sin arrecifes
y solamente la playa que le lame sus botas.
Estar tan sola con tus ejecutivos y vendedores de seguros
que creiste te dieron todo el amor que tuviste
y estando de sanatorio en sanatorio
veías que aún era demasiado el que pedías
o muy poco el que habías recibido.
Entonces sí podemos hablar de locura Anne?
Por qué tan doloroso ese gesto de manos cruzadas?
Y llegas como un buque avanzando
con la proa violenta y premiada
y así te conocí en Wellesley y tenías la edad que tengo yo ahora
y jugamos al tic tac toe o tocamos el piano juntos:
hablo que otras muchachas son como tú fuiste
y no te molestes
porque ellas escriben confessional poetry
y enseñan en los colleges y se suicidarán también
hablando de las autopistas que he construido
y los vacíos ya mutilados. Sin embargo Anne
tu retrato no se mueve de mi escritorio
y tus palabras, mejor dicho, esos marbetes con los que jugabas
le hacen cosquillas a mis relojes y mi vacío
y todo el silencio que puedo guardar en bolsas de papel
te lo comes tú como si fuera half chocolate
half ocean. No creas que no critico eso Anne Sexton
sino que a veces yo también te devoro.


ALEJANDRO SALAS.
Nació y murió en Caracas (1960-2003). Poeta, narrador, traductor, curador de arte, estudió en la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas. Trabajó como editor para Monte Ávila Editores. Entre sus libros de poesía pueden mencionarse: "Coloquio bajo la sombra de un piano" (1978), (de donde he tomado el poema "Entonces sí podemos hablar de locura Anne?"); "Señales de solsticio" (1979), "Textos para antes de ser narrados" (1980) y "Erotia" (1986).

lunes, 3 de enero de 2011

Cecilia Ortiz

Poemas de Cecilia Ortiz

AUTORRETRATO

Cecilia mía
Terciopelo
Mi vida
Asaltas y seduces
Anima destructiva
Que preserva el alma
Querida iluminada
Construyes y azotas
Enamorada de tus defectos
Envidiosa de tus placeres
Ignorada por los espejos
Seducida por los ojos
Rara comedida
Inconmensurable
¿Cómo fue que llegaste a este mundo?
Desposeída privilegiada
Aterida
Risa a carcajadas de jugar por los otros
Revendida postrada
Prostituida santa
Tormento sereno de tus noches
Alba de casas
Acariciando la humedad
De una sola soledad
Cristalina borracha
Borrada y aparecida
Cuando tú quieras Cecilia
Saldremos otra vez
pero eso sí
Con la máscara
Por favor sin ella
Me estoy acercando al triunfo de quererte
Espíritu torcido
Naufragante
Viva muerta
A como dé lugar
Tremendista arrepentida

Culpable sin una culpa

CONQUISTA

Una carga de frutos pesados
no me hace amarga

Soy un ser conquistado por la delicia


CECILIA ORTIZ. Poeta venezolana (1951). Ha publicado "Trébol de la memoria" (1978), "La pasión errante" (1984), "Autorretrato" (1993), de donde tomé los textos que he posteado,y la antología "Trébol" (2008).